¿Qué podría ser más tentador que un Cheesecake cremoso con el sabor refrescante del limón y la dulzura del merengue? Esta receta combina lo mejor de ambos mundos en un postre irresistiblemente delicioso que seguramente impresionará a tus invitados.
Además, ¡es mucho más fácil de preparar de lo que podrías imaginar! Sigue leyendo para descubrir cómo hacer este Cheesecake de limón y merengue en tu propia cocina.
Ingredientes:
- Para la base:
- 200g de galletas de vainilla
- 100g de mantequilla derretida
- Para el relleno:
- 500g de queso crema
- 150g de azúcar
- 3 huevos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- Ralladura y jugo de 2 limones
- Para el merengue:
- 3 claras de huevo
- 100g de azúcar
Instrucciones:
- Preparar la base: Comienza triturando las galletas de vainilla en un procesador de alimentos hasta obtener migajas finas. Luego, mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas. Presiona esta mezcla en el fondo de un molde desmontable para cheesecake y refrigéralo mientras preparas el relleno.
- Preparar el relleno: En un tazón grande, bate el queso crema y el azúcar hasta que estén suaves y cremosos. Agrega los huevos, uno a la vez, batiendo bien después de cada adición. Luego, incorpora el extracto de vainilla, la ralladura y el jugo de limón, mezclando hasta que todos los ingredientes estén combinados de manera uniforme.
- Hornear el cheesecake: Vierte la mezcla de queso crema sobre la base de galleta preparada en el molde. Hornea el cheesecake en un horno precalentado a 160°C durante aproximadamente 45-50 minutos, o hasta que los bordes estén firmes pero el centro aún esté ligeramente tembloroso. Una vez listo, apaga el horno y deja enfriar el cheesecake dentro del horno con la puerta entreabierta durante 1 hora.
- Preparar el merengue: Mientras el cheesecake se enfría, prepara el merengue. En un tazón limpio y seco, bate las claras de huevo a punto de nieve. Agrega gradualmente el azúcar mientras continúas batiendo, hasta que se formen picos firmes y brillantes.
- Decorar con merengue: Una vez que el cheesecake se haya enfriado por completo, extiende el merengue sobre la parte superior del cheesecake, creando picos con una espátula o una cuchara. Puedes dorar ligeramente el merengue con un soplete de cocina si lo deseas, para un acabado aún más elegante.
- Servir y disfrutar: Finalmente, refrigera el cheesecake durante al menos 4 horas, o preferiblemente durante toda la noche, para que se asiente completamente. Cuando esté listo para servir, corta en porciones generosas y disfruta de esta exquisita delicia con tus seres queridos.
Con esta receta fácil y deliciosa, estarás listo para impresionar a tus amigos y familiares en cualquier ocasión.
El cheesecake de limón y merengue es la combinación perfecta de sabores frescos y texturas suaves que seguramente te dejará con ganas de más.
¡Disfruta y comparte esta exquisita delicia con tus seres queridos!
